Qué es la keratina para el cabello y cómo funciona
- Kiki Lemos
- hace 2 días
- 13 Min. de lectura
Seguro que has oído hablar mil veces de la keratina, pero ¿sabes realmente qué es y por qué es tan crucial para tu melena? Dicho de forma sencilla, la keratina es la proteína principal de la que está hecho tu pelo. Es como los cimientos y la estructura de un edificio: le da fuerza, forma y elasticidad a cada hebra.
La proteína esencial que da vida a tu cabello

Para visualizarlo mejor, piensa que cada uno de tus cabellos es como una cuerda tejida con muchísimos hilos diminutos. Cuando tu melena está sana, esa "cuerda" es fuerte, compacta y suave porque sus fibras de keratina están perfectamente alineadas y unidas.
El problema es que esta estructura proteica es muy delicada. El día a día la pone a prueba constantemente: el calor de las planchas y secadores, los rayos del sol, los tintes o incluso el cloro de la piscina son enemigos que van desgastando y rompiendo esas fibras de keratina.
Poco a poco, esa cuerda se va deshilachando. Y esas roturas son las que se manifiestan como los problemas que todas conocemos de sobra:
El temido encrespamiento o frizz.
Las puntas abiertas que se parten con solo mirarlas.
Un cabello opaco, sin vida y áspero al tacto.
Una melena porosa que parece no tener control.
El pilar de la salud capilar
La keratina no es solo un componente más, es prácticamente todo. Constituye alrededor del 95% de la composición del cabello, actuando como un escudo protector frente a las agresiones externas. Entender esto es fundamental para comprender por qué los tratamientos de keratina se han vuelto tan populares; de hecho, puedes aprender más sobre los hábitos de consumo en peluquerías españolas para ver su auge.
Cuando aplicamos un tratamiento de keratina, lo que hacemos en realidad es rellenar las grietas y huecos de la fibra capilar con nueva proteína. Le devolvemos la materia, el cuerpo y la solidez que había perdido.
Este proceso de "reconstrucción" es el secreto detrás de ese resultado espectacular de un cabello más liso, brillante y, lo más importante, visiblemente más sano. No se trata de un simple maquillaje para el pelo, sino de una reparación profunda que restaura la arquitectura interna de la hebra, fortaleciéndola desde dentro.
Los beneficios reales de un tratamiento de keratina

Hablar de un tratamiento de keratina es mucho más que hablar de un simple alisado. Es una auténtica metamorfosis para tu pelo, una forma de devolverle la vida y la salud que ha perdido. Los resultados van más allá de lo que se ve a simple vista; se trata de una mejora profunda, estructural, que notarás desde el primer momento.
Lo primero que salta a la vista es una reducción drástica del encrespamiento. Piensa en cada pelo como si tuviera una capa de tejas protectoras, que es la cutícula. Cuando el cabello está dañado, esas tejas se levantan y dejan que entre la humedad del ambiente. ¿El resultado? El temido frizz. La keratina funciona como un pegamento de alta calidad que vuelve a unir esas tejas, alisando la superficie y creando una barrera protectora.
Este sellado no solo combate el encrespamiento de inmediato, sino que también blinda tu melena contra el futuro. El pelo se vuelve mucho más resistente a la humedad y a esos días lluviosos en los que parece que todo se descontrola, manteniéndose pulido y bajo control.
Brillo, suavidad y una melena fácil de manejar
Cuando la superficie de cada hebra está perfectamente lisa, la luz rebota en ella de una forma increíble. Esto se traduce en un brillo espejo que grita "pelo sano". La suavidad es otro mundo; pasar los dedos por el cabello se convierte en un placer, sin nudos ni texturas ásperas.
Pero donde realmente te cambia la vida es en la rutina diaria. Estas son las ventajas prácticas:
Secado mucho más rápido: Al estar la cutícula sellada, el pelo es menos poroso y no absorbe tanta agua. Esto significa que el tiempo de secado se puede reducir hasta en un 50%. ¡Menos tiempo de secador!
Peinado sin esfuerzo: Olvídate de pelearte con la plancha cada mañana. Tu melena se vuelve infinitamente más dócil. A menudo, un simple golpe de aire con el secador es suficiente para que quede perfecta.
Reparación desde dentro: A diferencia de una mascarilla que actúa por fuera, la keratina penetra y rellena las grietas de la fibra capilar. Esto lo fortalece desde el núcleo, haciéndolo mucho más resistente a la rotura.
Su popularidad no es una moda pasajera; es la prueba de que funciona. De hecho, en España se calcula que el 35% de los ingresos de muchas peluquerías en ciudades vienen de tratamientos reconstructores como la keratina. Esto nos dice que casi uno de cada tres clientes busca activamente estos beneficios.
Un tratamiento de keratina no es un gasto, es una inversión. Inviertes en la salud de tu melena y, sobre todo, en tu propio tiempo. Te devuelve el control y simplifica tu día a día de una forma increíble.
En resumen, entender qué es la keratina para el cabello es darse cuenta de su poder para reconstruir, proteger y embellecer. Aunque pueda parecerse a otros servicios de nutrición, sus efectos van un paso más allá. Si te pica la curiosidad y quieres comparar, te invitamos a descubrir qué es el botox capilar y por qué lo necesitas en nuestro otro artículo.
Cómo elegir el tratamiento de keratina ideal para ti
El mundo de la keratina es mucho más grande de lo que parece a simple vista. No todos los tratamientos son iguales ni buscan lo mismo, por eso, dar con la opción perfecta para ti es el paso más importante para conseguir los resultados que de verdad quieres. La clave está en conocer bien tu cabello y tener claras tus expectativas.
Es normal sentirse un poco perdida al principio. Oirás hablar de "alisado brasileño", "shock de keratina" o "cauterización capilar" y puede que no sepas por dónde empezar. No te preocupes, cada uno tiene su propósito, una duración distinta y un nivel de intensidad diferente.
Para ponerlo fácil, podemos agruparlos en dos grandes familias: los que buscan principalmente alisar y bajar el volumen, y los que se enfocan en una reparación profunda y en decirle adiós al encrespamiento sin cambiar la forma natural de tu pelo. Elegir bien es el primer paso hacia una melena de escándalo.
¿En qué se diferencian los tratamientos de keratina?
La gran diferencia entre unos y otros suele estar en su fórmula y, por supuesto, en el objetivo final. No es lo mismo un cabello muy rizado que sueña con un liso pulido, que una melena ondulada que solo quiere librarse del frizz y potenciar su brillo.
El alisado brasileño: el rey del liso
Este es, sin duda, el tratamiento más famoso y potente si lo que buscas es alisar. Su misión es transformar la estructura del cabello para conseguir un liso que dure meses, reduciendo drásticamente el rizo y el volumen. Las versiones más modernas y seguras han dejado atrás el formol, utilizando en su lugar otros compuestos mucho más amables con tu pelo y tu salud.
Shock de keratina o cauterización: un rescate capilar
Piensa en este tratamiento como un auténtico salvavidas para melenas dañadas. Su objetivo no es alisar, sino rellenar la fibra capilar con la keratina perdida y sellar la cutícula para reparar los estragos visibles. Es perfecto si tu pelo está castigado por las decoloraciones, los tintes o el abuso de planchas y secadores. El resultado es un cabello mucho más fuerte, brillante y sin encrespamiento, pero que mantiene su onda o rizo natural.
Comparativa de tratamientos de keratina
Para que veas de forma clara qué tratamiento se adapta mejor a ti, hemos creado esta tabla. Esta tabla compara los principales tipos de tratamientos de keratina para ayudarte a elegir el más adecuado según tus necesidades y tipo de cabello. Fíjate en cada punto y piensa en cómo está tu pelo ahora mismo y qué te gustaría conseguir.
Como ves, la elección depende totalmente de ti. Un shock de keratina puede ser el punto de partida perfecto si tu melena pide a gritos un respiro, mientras que un alisado brasileño es la solución definitiva si tu batalla diaria es contra el volumen y los rizos que no consigues domar.
La decisión más importante no es solo el tipo de tratamiento, sino la calidad del producto y, sobre todo, la experiencia del profesional. Un buen diagnóstico capilar previo es fundamental para asegurar un resultado seguro y espectacular.
Elijas la opción que elijas, el precio es un factor que debes considerar, ya que cambia según el tratamiento y el salón. Si quieres hacerte una idea más precisa, puedes echar un vistazo a nuestra guía completa sobre el tratamiento de keratina y su precio en peluquería. Te ayudará a planificar tu inversión en belleza.
El proceso de aplicación de keratina explicado paso a paso
Saber qué es la keratina para el cabello está muy bien, pero entender cómo se aplica en un salón te da una perspectiva completamente distinta. No se trata de echar un producto y ya está; es un ritual técnico y muy preciso donde cada paso tiene su razón de ser. Vamos a desvelarte lo que ocurre en el sillón del estilista para que comprendas la magia detrás de una melena espectacular.
Todo arranca con la preparación, una fase tan importante como el tratamiento en sí. El objetivo aquí es dejar la fibra capilar totalmente lista y receptiva para que pueda absorber hasta la última gota de keratina.
Fase 1: Preparación y limpieza profunda
El camino hacia un pelo de escándalo no empieza con la keratina, sino con un lavado muy específico.
Lavado con champú purificante: El estilista utiliza un champú especial, con un pH alcalino o clarificante. Olvídate del que usas en casa; este está diseñado para abrir ligeramente la cutícula del cabello, esa capa de "escamas" que protege cada hebra. Al abrirla, creamos la vía de acceso perfecta para que el tratamiento penetre hasta el córtex.
Secado parcial: Después, se quita el exceso de agua con una toalla y se usa el secador hasta que el pelo esté más o menos a un 80% seco. Es un punto clave: el cabello no puede estar goteando, porque el agua ocuparía el espacio que necesitamos para la keratina.
Fase 2: Aplicación y activación del producto
Y ahora sí, llega el momento de la verdad. Aquí es donde la mano experta y la precisión del profesional lo cambian todo.
El cabello se divide en secciones pequeñas y fáciles de manejar. Con una brocha, se va aplicando la keratina con mucho cuidado, mechón a mechón, desde la raíz hasta las puntas. Es súper importante no pringar el cuero cabelludo; el foco está en la fibra capilar, garantizando que todo el pelo quede cubierto por igual.
Una vez aplicado, se deja actuar. El tiempo de exposición varía según la marca y el tipo de pelo, pero suele rondar entre los 20 y 40 minutos. Es el tiempo que necesita la fórmula para que el cabello la empiece a absorber.
Imagina que estás barnizando un mueble de madera. Primero lo lijas (el lavado purificante) para abrir bien el poro. Después, aplicas el barniz (la keratina) para que se impregne y rellene cualquier imperfección, dejándolo liso y protegido.
Fase 3: El sellado con calor
Este es el último paso, el que sella todo el trabajo y desata la "magia". Después de dejar reposar el producto y secar el pelo al 100% (con la keratina aún puesta), llega el turno de la plancha.
El calor no es un adorno, es el activador. Al pasar la plancha a una temperatura controlada, los componentes de la fórmula se activan y se fusionan con la estructura interna del pelo. El calor cierra y sella las cutículas que abrimos al principio, dejando atrapada la proteína dentro. Así es como se consigue esa superficie pulida, brillante y lisa que define a un buen tratamiento de keratina. Este sellado es el que hace que el resultado sea tan espectacular y, sobre todo, duradero.
Cómo prolongar los efectos de tu tratamiento de keratina
Has invertido en tu melena y ahora quieres que ese aspecto sano, liso y brillante dure el máximo tiempo posible. ¡Es lo normal! La buena noticia es que alargar la vida de tu tratamiento de keratina es más sencillo de lo que parece. Solo se trata de ajustar un poco tu rutina de cuidados para proteger esa proteína que acabas de sellar en tu cabello.
El cambio más importante, y donde casi todo el mundo falla, es en la ducha. Los champús y acondicionadores que solemos tener por casa a menudo contienen sulfatos y cloruro de sodio. Piensa en ellos como los dos grandes saboteadores de tu tratamiento. Los sulfatos limpian de forma tan agresiva que pueden arrastrar la keratina, mientras que la sal (cloruro de sodio) abre la cutícula y acelera la pérdida de ese efecto liso y reparado que tanto te gusta.
Elige tus productos con sabiduría
Para mantener los resultados impecables durante meses, la regla de oro es muy simple: usa exclusivamente productos pensados para cabellos con tratamiento de keratina.
Champús sin sulfatos: Busca que en la etiqueta ponga claramente "sin sulfatos" o "sulfate-free". Estos champús son mucho más suaves y limpian sin llevarse por delante la capa de keratina. Si no sabes por dónde empezar, puedes echar un vistazo a nuestra guía para descubrir el mejor champú sin sulfatos para un cabello saludable y encontrar el tuyo.
Acondicionadores y mascarillas nutritivas: Utiliza acondicionadores sin sal y, al menos una vez por semana, regálale a tu pelo una mascarilla rica en keratina hidrolizada o aminoácidos. Es como darle un pequeño "chute" de refuerzo para reponer la proteína que se va perdiendo con el tiempo.
No es casualidad que cada vez veamos más productos de este tipo en las tiendas. De hecho, el mercado español de productos capilares con queratina está creciendo a un ritmo de casi el 6,8% anual, lo que demuestra que cada vez nos preocupamos más por cuidar bien estos tratamientos.
Hábitos clave para un resultado duradero
Más allá de lo que usas para lavarte el pelo, tus gestos del día a día también suman. Son pequeñas cosas que, juntas, protegen tu inversión y mantienen tu melena espectacular por más tiempo.
Cuidar tu tratamiento de keratina es como proteger la manicura. Si acabas de hacerte unas uñas preciosas, no te pondrías a fregar sin guantes con un producto abrasivo, ¿verdad? Con tu pelo pasa lo mismo: hay que evitar todo aquello que pueda "desgastar" el resultado.
Entender cómo funciona el tratamiento te ayuda a valorar por qué cada paso es tan importante, sobre todo el sellado final con calor, que es lo que garantiza que todo dure.

Aquí tienes otros consejos que marcan la diferencia:
Lava el pelo con menos frecuencia: Intenta espaciar los lavados a dos o tres veces por semana. Cuanto menos lo expongas al agua y al champú, más aguantará la keratina.
Protégete del cloro y la sal: ¿Día de piscina o de playa? Antes de meterte en el agua, moja tu pelo con agua dulce y aplica un poco de acondicionador sin aclarado. Esto crea una barrera protectora que impide que el cloro y la sal estropeen el tratamiento.
No te olvides del protector térmico: Aunque seguramente usarás menos la plancha, si algún día la necesitas, aplica siempre un buen protector de calor. El calor directo sin protección sigue siendo uno de los mayores enemigos de un pelo sano, con o sin keratina.
Preguntas frecuentes sobre los tratamientos de keratina
Es lógico que te asalten un montón de dudas antes de lanzarte a la piscina con un tratamiento de keratina. ¿Me va a estropear el pelo? ¿Y si lo tengo teñido? ¿Cuánto me va a durar? Son las preguntas del millón, y para que tomes la decisión con total tranquilidad, vamos a resolverlas aquí mismo, sin rodeos.
Aclarar estas incógnitas es el último paso para que entiendas de verdad qué es la keratina para el cabello y todo lo que puede hacer por ti. Queremos que te sientas segura y con ganas de ver esa transformación que tienes en mente, pero siempre con toda la información en tu mano.
¿El tratamiento de keratina estropea el pelo?
Esta es la gran preocupación, y la respuesta es un no rotundo, siempre que se haga bien. Un tratamiento de keratina de calidad, aplicado por manos expertas, está diseñado precisamente para lo contrario: para reparar y fortalecer el cabello. Su misión es reponer esa proteína que hemos perdido y sellar la cutícula para que el pelo recupere su salud.
El mito del daño suele venir de dos sitios: o bien de productos antiguos que llevaban formol (una sustancia que hoy en día se evita en los salones serios) o de una mala aplicación. Por ejemplo, pasar la plancha a una temperatura demasiado alta para tu tipo de pelo puede causar un daño térmico que no tiene nada que ver con la keratina en sí.
La clave para que un tratamiento de keratina sea un éxito y totalmente seguro se apoya en dos pilares: la calidad del producto y la experiencia de quien te lo aplica.
Por eso es fundamental ir a un salón de confianza, donde primero estudien tu melena y usen fórmulas de primera categoría, libres de químicos agresivos.
¿Puedo hacerme la keratina si tengo el pelo teñido?
No solo puedes, ¡es que te va a venir de maravilla! El pelo que ha pasado por tintes o decoloraciones es, por definición, más poroso y tiende a resecarse y romperse. El tratamiento de keratina actúa como una especie de bálsamo reconstructor, rellenando esas pequeñas fisuras y devolviéndole la fuerza que perdió en el proceso.
Y hay más. La keratina tiene un beneficio extra para los cabellos con color: al sellar la cutícula, ayuda a que el pigmento del tinte se quede "atrapado" dentro de la fibra capilar. Esto no solo protege el color y hace que no se vaya con los lavados tan rápido, sino que le da un brillo espectacular. Lo ideal es dejar pasar una o dos semanas entre el tinte y la keratina para no saturar el pelo.
¿Cuánto duran los resultados de la keratina?
Aquí no hay una respuesta única, porque depende mucho del tipo de tratamiento, de cómo sea tu pelo y, sobre todo, de cómo lo cuides en casa. Pero, para que te hagas una idea, lo normal es que los efectos de un alisado de keratina profesional se mantengan visibles entre 3 y 5 meses.
El factor que más influye para alargar su vida es, sin duda, usar los productos adecuados después, especialmente un champú sin sulfatos. Este pequeño gesto en tu rutina puede ser la diferencia entre disfrutar de tu melenaza cinco meses o ver cómo los efectos se desvanecen en la mitad de tiempo.
¿La keratina me dejará el pelo completamente liso?
Depende por completo de lo que tú quieras conseguir y del tratamiento que elijas. Si tu sueño es un liso tabla impecable, un alisado brasileño tiene un poder alisador enorme y puede transformar de arriba abajo un cabello muy rizado.
Pero no, no todas las keratinas alisan. Hay opciones, como los shocks de keratina o los tratamientos antiencrespamiento, que no buscan cambiar la forma de tu pelo. Su objetivo es otro: nutrirlo a fondo, quitar el frizz y definir el rizo o la onda que ya tienes. Por eso es tan importante que hables con tu estilista, le cuentes qué esperas y te dejes aconsejar sobre el servicio que de verdad encaja con lo que buscas.
En mirik beauty, entendemos que cada melena es un mundo y necesita un cuidado a su medida. Nuestro equipo de expertos te asesorará para encontrar el ritual de keratina perfecto que saque a relucir la mejor versión de tu cabello. Descubre una experiencia de belleza de lujo en mirikbeauty.com.
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